2019
El objetivo de esta reforma integral de vivienda era conseguir unos espacios muy funcionales, amplios y de gran luminosidad. Para ello se eliminó todo vestigio del estado original creando un espacio en bruto sobre el que empezar de cero.
Así, el programa de la vivienda se organizó en dos zonas. Por un lado, una gran zona de día, iluminada por dos grandes ventanales que dan acceso a una terraza corrida con vistas al río Manzanares.
La zona privada de la casa consta de dos dormitorios con baño compartido y un dormitorio principal que incorpora una zona de trabajo, un vestidor y un baño, piezas que ocupan los espacios sin luz natural de la casa. Una terraza privada completa el programa de este dormitorio, confiriéndole un carácter de apartamento autónomo.
En toda la vivienda predominan las líneas puras y los colores neutros para crear espacios luminosos y amplios. Por su parte, en las estancias que albergan varios usos es el cambio de pavimento el que
determina las diferentes funciones.